¿Tu hijo no está listo para el kínder? Aprendde tiene esta opción para ti

Hijo no está listo para el kínder

La entrada al kínder o preescolar es un momento sumamente importante en la vida de todo niño(a), ya que usualmente marca el inicio de su educación formal. 

Sin embargo, puede que no todos los pequeños(as) estén preparados para empezar la guardería a la edad típica, especialmente aquellos que han sido categorizados como neurodivergentes.

Los niños neurodivergentes, incluidos aquellos que se encuentran dentro del espectro autista o han sido diagnosticados con condiciones como Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad, dificultades de aprendizaje y otras diferencias cognitivas, pueden presentar retos únicos que requieren atención especializada.

Si tu hijo(a) tiene problemas para despegarse de tí con facilidad, desarrollando su curiosidad, explorando lugares y objetos desconocidos, requiere de supervisión constante, no puede interpretar ni seguir instrucciones o imitar a otros niños y cuenta con problemas para regular sus emociones, el kínder puede esperar.

No obstante, existen alternativas previas a la escuela formal que comprenden que el cerebro de cada niño está conectado de forma única, lo que conduce a diversas fortalezas y desafíos

Aprendde reconoce que la neurodiversidad significa comprender y aceptar que los niños cuentan con diferentes estilos de aprendizaje, preferencias comunicativas y tipos de interacciones sociales. 

Por esto, ofrecemos grupos terapéuticos de atención diferenciada y personalizada en Monterrey, enfocados en el trabajo de las áreas de lenguaje, conducta, sensorial, maduración, aprendizaje y neuromotricidad.

Con grupos pequeños de hasta cinco alumnos, los niños pueden aprender en espacios diseñados especialmente para su aprendizaje y desarrollo.

A partir del 23 de agosto, niños de 2 a 5 años pueden ser parte de este programa, diseñado para ser llevado a cabo de lunes a viernes de 9:00a.m. a 1:00 p.m.

Con las mejores metodologías especializadas para niños con trastornos del neurodesarrollo y problemas de comunicación y con nuevas instalaciones, esta alternativa puede beneficiar a largo plazo la integración de tu hijo(a) a un entorno académico en el futuro.

Además tendremos escuela de padres cada mes, para apoyarte y acompañarte en cada etapa de su desarrollo con el propósito de juntos crear un entorno más integrador y propicio para todos los niños, incluidos los neurodivergentes.

5 conceptos equivocados sobre el autismo

Frases sobre el autismo

El trastorno del espectro autista (TEA) es una condición que suele estar rodeada de mitos y conceptos erróneos sobre cómo se vive y cómo se “tiene que ver”. 

Estos malentendidos perpetúan estereotipos perjudiciales y contribuyen a la marginación de las personas con autismo. 

Por desgracia, muchas frases y expresiones comunes refuerzan involuntariamente estas narrativas perjudiciales. 

Exploremos algunas de estas frases, analizando por qué son perjudiciales y esforcémonos por fomentar una mejor comprensión del autismo.

1. «No pareces autista»

Esta frase aparentemente inocente resta valor a la gran diversidad dentro del espectro autista y su comunidad. 

Hay que recordar que al ser una condición invisible, no hay un aspecto «típico» asociado a ella y, por ende, las personas con autismo proceden de todos los estratos sociales y tienen una amplia gama de capacidades y dificultades. 

Al insinuar que alguien no encaja en el estereotipo del autismo, perpetuamos la idea errónea de que el autismo es un trastorno con una apariencia singular.

2. «Debe tener un alto funcionamiento»

Los términos «alto funcionamiento» y «bajo funcionamiento» se utilizan a menudo para clasificar a las personas con TEA en función de sus capacidades percibidas

Sin embargo, estas etiquetas simplifican la compleja naturaleza de la condición y no captan los puntos fuertes, los retos y las necesidades de las personas con autismo. 

Asimismo, pueden menospreciar la importancia de reconocer y tener en cuenta las distintas capacidades.

3. «No me gusta lidiar con personas autistas, sólo son difíciles«

Atribuir ciertos comportamientos problemáticos de personas con autismo a que son «difíciles» simplifica en exceso las causas subyacentes. 

El autismo puede provocar dificultades en la comunicación social, el procesamiento sensorial y la regulación emocional, que pueden manifestarse como comportamientos atípicos. 

Este tipo de comentarios no sólo desestiman los retos a los que se enfrentan las personas con autismo, sino que perpetúan la falta de comprensión y empatía por parte de gente neurotípica.

4. «Ya se te pasará» o “Si haces x, te puedes curar de tu autismo”

El autismo es un trastorno del desarrollo que dura toda la vida y aunque las personas con TEA pueden desarrollar mecanismos de afrontamiento y adquirir habilidades para desenvolverse en el mundo de forma más eficaz, este sigue siendo parte integrante de su identidad. 

La noción de «superarlo» implica que el autismo es un problema que hay que curar, ignorando los puntos fuertes y las perspectivas únicas que poseen las personas en el espectro. 

Este tipo de frases niegan la necesidad de apoyo y aceptación a lo largo de la vida de una persona y perpetúa el estereotipo de que están “enfermas”.

5. «Las personas con autismo carecen de empatía»

Aunque pueden tener dificultades para expresar y comprender las emociones de forma convencional, las personas con TEA sienten empatía como cualquier persona neurotípica.

Este prejuicio puede surgir debido a la incomprensión de los matices de la interacción social de las personas con autismo. 

Pintar a todas las personas con autismo como carentes de empatía perpetúa la falsa noción de que están emocionalmente desconectadas o son insensibles, lo que contribuye a su marginación y exclusión.

El lenguaje desempeña un papel crucial en la formación de las percepciones sociales, y las frases que utilizamos en relación con el autismo deben considerarse cuidadosamente. Desacreditando y abordando frases perjudiciales, podemos esforzarnos por fomentar una sociedad más inclusiva y comprensiva. Trabajemos para derribar barreras, erradicar estereotipos y celebrar la rica diversidad de la comunidad neurodivergente.

¿El autismo es hereditario?

¿El autismo es hereditario?

Si bien el trastorno del espectro autista no tiene una única causa identificada, tomando en consideración la complejidad del trastorno y la variabilidad de los síntomas y sus grados, es que se habla de una condición multicausal.

Según explican expertos en el tema como la psicoterapeuta Edna Rhodes, tanto la genética como el entorno pueden ser factores que influyen en el desarrollo de un TEA.

En el autismo o en el trastorno del espectro autista encontramos estas posibles causas genéticas en combinación con factores ambientales”, indica.

Del mismo modo, Rhodes destaca la presencia de distintos síndromes genéticos que parecen estar relacionados con los trastornos del espectro autista, como el síndrome de Rett o el síndrome del cromosoma X frágil. 

También es importante considerar que si ya hay un miembro familiar que se encuentra dentro del espectro autista, las posibilidades de tener un hijo o hija con autismo se elevan en el segundo o tercer embarazo, afirma la especialista.

Algunas veces son gracias a estas similitudes y factores heredados que en los procesos de diagnóstico de los hijos, algunos padres se van dando cuenta que también forman parte del espectro o son neurodivergentes” reflexiona.

Por otra parte, se habla de la presencia de mutaciones genéticas que pueden aumentar la probabilidad de desarrollar un TEA aún y cuando la carga genética familiar está considerada dentro de los parámetros esperados.

Entonces, sí, si hay cuestiones genéticas que se pueden heredar, aunque también podemos tener mutaciones en las que aún con una carga genética regular la persona termine desarrollando un TEA”, finaliza la experta.

Juguetes para niños con autismo

Juguetes para niños con autismo

Los niños y niñas con autismo tienen necesidades específicas en cuanto al desarrollo sensorial, social y comunicativo, lo que puede significar un reto a la hora de conseguir juguetes que los apoyen y diviertan. 

Idealmente, los juguetes de tu hijo/a deben proporcionar un estímulo sensorial adecuado, favoreciendo la comunicación y habilidades sociales, además de fomentar su independencia y capacidad de resolver problemas. 

En Aprendde te compartimos 10 tipos de juguetes que pueden ayudar a niños y niñas con autismo a desarrollar sus habilidades mientras se divierten.

1. Pelotas sensoriales

Son pelotas con textura que proporcionan estimulación sensorial y mejoran las habilidades motoras; también pueden ayudar a la coordinación mano-ojo.

2. Juguetes para ansiedad (‘Fidget’ toys)

Estos pequeños juguetes pueden ayudar a los niños con autismo a concentrarse y aliviar el estrés. 

Los hay de diferentes formas y texturas, como las pelotas antiestrés, juguetes blandos y los juguetes desenredables.

3. Collares masticables.

Son collares de silicona que proporcionan a los niños con autismo una forma segura y discreta de satisfacer sus necesidades sensoriales orales, habiendo gran variedad de colores y texturas.

4. Cobijas con peso extra

Estas cobijas proporcionan una estimulación de presión profunda, que puede ayudar a los niños con autismo a relajarse y dormir mejor.

Incluso pueden utilizarse como base para jugar en el piso dentro de la casa o el jardín.

5. Temporizadores visuales. 

Estos temporizadores pueden ayudar a entender el concepto del tiempo y reducir la ansiedad.

Existen en diferentes formas y tamaños, y algunos incluso se pueden personalizar.

6. Bloques de construcción

Estos juguetes pueden ayudar a los niños con autismo a mejorar sus habilidades motoras, su creatividad y su capacidad para resolver problemas

También proporcionan estimulación sensorial.

7. Tiendas de campaña

Las tiendas pueden proporcionar un espacio seguro y tranquilizador al cual retirarse cuando se sienten abrumados. 

Dentro de las tiendas se pueden construir espacios personalizados con libros, juguetes favoritos, mantas, etc.

8. Juguetes musicales

Estos juguetes pueden ayudar a los niños con autismo a mejorar sus habilidades auditivas y de procesamiento sensorial, también siendo una forma divertida de expresarse y construir melodías.

9. Rompecabezas

Los rompecabezas pueden ser herramientas útiles para mejorar las habilidades espaciales y de resolución de problemas. 

Dependiendo de la edad de tu hijo/a puedes encontrar una gran variedad de rompecabezas, desde diseños sencillos hasta los más elaborados tanto en físico como en juegos de computadora.

10. Contenedores sensoriales

Son recipientes llenos de diferentes materiales, como arena, agua o arroz, que proporcionan estimulación sensorial y mejoran la motricidad fina, además de que pueden contribuir al desarrollo del lenguaje y la creatividad.

Crea el tuyo en casa, sólo necesitas un contenedor o contenedores de plástico y distintos materiales sensoriales que tu niño/a pueda explorar libremente.